En la calle negrillos y en otras calles de nuestro pueblo los meceeros fueron divertimentos de los vecinos acompañados siempre por cánticos que provienen de tiempo inmemorial. Mi hija Carmen -como no podía ser de otra manera- quiso rememorar tiempos pasados en la comida vecinal en plena calle realizada con motivo de la fiesta de la Cruz de mayo. Esta costumbre fue usual hasta que en los años sesenta del pasado siglo llegaron las primeras televisiones en blanco y negro. |